Uno de los tantos pequeños orgullos de Cuba es ver cómo los éxitos generales de su sistema educacional se manifiestan en la creciente competitividad de niños y jóvenes cubanos en concursos internacionales.

Recorren los mundos desde matemáticos imberbes que aparecen en el Libro de Récords Guinnes, hasta Grandes Maestros del ajedrez cuyos rostros aún luchan contra el acné juvenil, pero que aparecen en el ranking mundial del juego ciencia.

Uno de ellos, Raysel Sosa Rojas, fue recientemente ganador regional de América Latina y el Caribe en el XV Concurso Internacional de Dibujo Infantil sobre Medio Ambiente del PNUMA. Pero no pudo recibir su premio, una cámara fotográfica digital NIKON, diz que por contener partes y piezas de origen norteamericano, razón por la cual la entrega violaría las disposiciones del bloqueo estadounidense contra Cuba.

Parece inmensamente ridículo, de no ser dramáticamente cierto.Por mi parte, sólo recuerdo cómo los servicios especiales yankees hacían y hacen llegar excelentes cámaras digitales a sus agentes pagados en Cuba; a los llamados opositores, a los denominados periodistas independientes.Que no se atrevan a decirme que no.Yo mismo, como agente encubierto de la Seguridad del Estado cubano con fachada de periodista "independiente", recibí 3. Una de ellas a inicios de 1997, cuando esos equipos eran una novedad en el mercado mundial.No olvido que por aquellos días un alto oficial de la Seguridad cubana se entrevistó conmigo y me comentó que en la cadena de mando,"él único pendiente por ver tu cámara es el Ministro del Interior.Aquí casi nadie las conoce".

Me limito a reproducir la entrevista concedida por el Profesor del niño Raysel, Jorge Jorge González, a la Sra. Ana Aoki representante de la agencia japonesa Jijispress, filial Sao Paulo, a propósito de los hechos.Por sí misma dice.

TEXTO INTEGRO DE LA ENTREVISTA CONCEDIDA A LA SRA. ANA AOKI, REPRESENTANTE DE LA AGENCIA JAPONESA “JIJISPRESS, FILIAL SAO PAULO, BRASIL, A PROPÓSITO DE LA NEGATIVA DE LA EMPRESA “NIKON