Por Jesús María Nery Barrios

En un mundo en el que la informática, la información, las campañas de desinformación, el adoctrinamiento ideológico globofascista están tomando cada vez más fuerza y cada día se van haciendo más sofisticados, es aun más necesario y vital contar con todas las herramientas y armas al servicio de la verdad en defensa de la clase trabajadora venezolana que está llevando adelante la Revolución Bolivariana.

Sobre todo en esta fase capitalista corporativista del sistema en que su proceso involutivo inexorable está llevando a la desesperación a sus clase política y su elite económica global y las campañas mundiales de desinformación ya no son producidas y utilizadas simplemente para sacar del camino a líderes populares molestos o incómodos para sus intereses, sino para legitimar el exterminio masivo de millones de trabajadores cuya fuerza de trabajo física se ha vuelto obsoleta en virtud del alto grado de tecnificación que ha alcanzado y ante el avance del deterioro medioambiental y la creciente escasez de recursos naturales y energéticos, a través de guerras mundiales nucleares, como ya se viene avizorando en el horizonte, y que no sólo involucrarán a las potencias salientes y entrantes, sino a todos y cada uno de nosotros, debido al nivel de interdependencia antes citado.

Ante este panorama que no necesariamente tiene que ser sombrío e inevitable, siempre y cuando tomemos colectiva y soberanamente las medidas apropiadas y oportunas, vemos con gran preocupación que la Revolución Bolivariana está perdiendo aplastantemente la guerra mediática a nivel internacional, sobre todo en la opinión pública de habla inglesa, que gústenos o no son la mayoría a nivel mundial, especialmente en Internet, que día a día se está convirtiendo en la fuente de información más utilizada en todo el planeta.

Y decimos esto con toda autoridad, como asiduos navegantes de la red que somos, no sólo bajando la musiquita de moda, chateando con los panas o buceándonos alguna que otra chica en bikini, sino principalmente sondeando los más importantes portales de noticias, en busca del balance informativo, de datos y análisis que lamentablemente no encontramos ni en los medios nacionales ni en los internacionales, echando mano no sólo de los tradicionales sino de los cada día más osados y enriquecedores medios alternativos, blogs, grupos de noticias, listas de correo, foros electrónicos y espacios privados que promueven el debate de ideas y que contra viento y marea se las arreglan diariamente para romper el cerco mediático impuesto por los mercaderes de la verdad y los traficantes de mentiras.

Aun así debemos alertar con tristeza que si bien la tarea se ha hecho fácil entre nuestros países hermanos de habla hispana, por la similitud idiomática y cultural, no ha sido así entre los millones de trabajadores e intelectuales de habla inglesa en todo el mundo que realmente han mostrado interés por el proceso de cambios en Venezuela, ya que lamentablemente carecen de alternativas y posibilidades de obtener información veraz, oportuna, imparcial y de fácil acceso en ese idioma, como no sean los monstruos mediáticos radicados principalmente en los Estados Unidos y que monopolizan la verdad para tergiversarla, manipularla y ofrecerla en el mercado informático como una mercancía más. Sólo podemos dar cuenta de una página conocida como “Venezuela Information Office�? (Oficina Informativa Venezolana), radicada en Washington D.C. y supuestamente subvencionada por el gobierno venezolano a razón de casi medio millón de dólares mensuales, para que cumpla la labor de informar en idioma inglés todo cuanto acontece en nuestro país, pero al hacerle el respectivo monitoreo los últimos 6 meses hemos podido comprobar que sólo emite entre cuatro y seis noticias nuevas al mes, sin ningún tipo de documento de análisis de la realidad venezolana por parte de algún autor nacional o extranjero y alguna que otra foto del presidente Chávez, como Ustedes mismos pueden comprobar entrando en la mencionada página a través de es siguiente enlace: http://www.rethinkvenezuela.com/index.html

También es de hacer notar el gran esfuerzo desplegado por la Agencia Bolivariana de Noticias, que ya cuenta con una sección en inglés con algunas de sus noticias principales desde hace algún tiempo, pero la misma no ha sido suficiente para cubrir la demanda que va creciendo diariamente.

Sin embargo, no todo fue así. Desde hacía ya 10 años había una página fundada y manejada por un reconocido periodista irlandés radicado en Londres, el Señor Roy S. Carson, un eterno enamorado de Venezuela su pueblo, su cultura y su historia, que se llamaba VHeadline.com Venezuela, con enfoques, noticias y análisis sobre Venezuela en idioma inglés (y desde el año 2005 también en español), que gracias al gran profesionalismo, imparcialidad y profundidad de él y su equipo de editores, colaboradores y comentaristas venezolanos, estadounidenses y europeos llegó a alcanzar la cifra de 71.000 archivos en su potente base de datos, que también servía como fuente de consulta para estudiantes e investigadores, con un promedio de casi un millón de lectores al día en su versión en inglés y de 300.000 en su versión en español.

Lamentablemente, desde hace dos meses, la página ya no está más en línea en su servidor original ni con la cantidad de secciones con las que contaba, a pesar de todos los esfuerzos realizados por todo su equipo editor y de escritores en todas partes del mundo para conseguir los recursos para financiar sus gastos operativos, dejando así un gran vacío desde el cual los eternos enemigos de Venezuela, tanto en Estados Unidos como en Europa, han venido socavando las mentes y en los corazones de millones de lectores en el mundo y así lograr manipularlos a su antojo en función de sus intereses genocidas autodestructivos y en detrimento de todos nuestros entrañables esfuerzos por lograr una vida permanentemente digna para la gran mayoría de explotados de Venezuela, América Latina y el mundo.

Sólo haciendo grandes sacrificios personales, tanto el Señor Roy S. Carson desde Londres como el Señor Patrick O’Donoghue desde Caracas, junto al equipo antes mencionado, han podido lograr un mínimo de presencia en la red a través de una página temporal de emergencia la cual puede ser accesada a través del siguiente enlace: http://web.onetel.com/~vheadline/emergency.htm y a través de un programa radial en la American Voice Radio de Estados Unidos que se oye a nivel mundial por Internet de lunes a viernes a las 2 de la tarde (Hora Legal de Venezuela) a través de este otro enlace: http://www.theamericanvoice.com/ (hacer clic en alguno de los Server); en donde se hace una selección diaria de las principales noticias, se entrevista a destacadas personalidades del acontecer nacional e internacional, se promueve el turismo hacia Venezuela, buscando con esto desmontar la campaña de miedo y terror contra nuestros atractivos turísticos y nuestra gente y se analiza desde una perspectiva imparcial, apegada al estado de derecho y la constitucionalidad en apoyo irrestricto a las soberanas decisiones del pueblo venezolano.

Sin embargo, como venezolano y asiduo lector de noticias, análisis y opiniones, como uno de los 26 millones que fuimos afectados por el apagón mediático del 11 de abril de 2002 y el paro petrolero de diciembre de 2002 y enero de 2003 y la permanente campaña de mentiras de nuestros medios, y poniéndome en los zapatos de millones de lectores inocentes que fuera de nuestro país sinceramente quieren conocer nuestra verdad, la verdad verdadera de este bonito proceso bolivariano, hago un llamado patriótico y revolucionario para que recuperemos esta importante arma de lucha contra el fascismo global que siempre tendrá sus fauces abiertas sobre nosotros, no sólo para adueñarse de nuestros recursos naturales y mineros, sino para exterminarnos como especie humana, ya que el socialismo que queremos construir, como ya lo fue advertido por sus padres fundadores científico-filosóficos, el marxismo, no puede construirse en un sólo país, ni siquiera en un continente, sino a escala mundial, y para lograr esto necesitamos la solidaridad de todos los trabajadores del mundo, que están tan amenazados como nosotros, pero para lograr esta solidaridad necesitamos que ellos nos conozcan, nos identifiquen tal como somos, con nuestros errores y defectos, pero también con nuestras capacidades y posibilidades, y todo eso sólo puede lograrse si contamos con las armas revolucionarias apropiadas del siglo XXI: la ciencia, la tecnología, el manejo de los idiomas más utilizados por los pobladores de este mundo y páginas como VHeadline.com, que a lo largo de 10 años han demostrado su importancia y su trascendencia para todos aquellos que quieren conocer la verdad sobre su mundo, interpretarlo, pero sobre todo, cambiarlo.